Celia Viñas, hija de un profesor de Escuela Normal, vive desde pequeña inquietudes didácticas y culturales completadas en sus años de Universidad en Barcelona. Después, como profesora, proyectó esta formación y su vocación docente -se consideraba madre y maestra- dentro y fuera de las aulas de la Almería de posguerra, desarrollando una gran labor educativa y literaria. Mujer vitalista, liberal, buscadora de nuevos horizontes y moderna en su pedadogía, entusiasma y motiva a sus alumnos con su peculiar estilo didáctico: representaciones teatrales, concursos, radio, tertulias, conferencias, excursiones, etc. Además, animó instituciones como la Biblioteca Villaespesa y movimientos como el Indaliano, abriéndoles caminos hacia otros puntos de la geografía nacional.

(Francisco Galera Noguera. "La figura de Celia Viñas y su repercusión pedagógica y cultural", Revista del Instituto de Estudios Almerienses, núm. 16, 1998)
 

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POEMA-RECORD DE JOSEP MARIA LLOMPART

In memoriam C.V. per a qui fou escrit,
fa temps i temps, aquest llunari.

I ara ja saps la mort, Cèlia Viñas
-ai aquell foc, foquet, cendra astorada.
Ara ja saps la mort. No et calen versos
ni ocells ni primaveres per alçar-la.

¿Ho veus? No s'ha aturat un sol rellotge
ni s'ha estremit la seda de la cala;
el vent, que desconeix la teva absència,
ajup les herbes del record...
Descansa.

Nosaltres sols, amb tota la mort teva,
reprendrem el camí.
Adéu, companya.

Josep M. Llompart
 

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SU OBRA LITERARIA

"Separar a Celia Viñas profesora y Celia Viñas escritora es desconocerla ya que, según Mª de Gracia Ifach, interpretaba su menester poéticamente, magnificando el sagrado oficio de instruir. Es decir, que enseñaba como una madre puede enseñar a sus hijos, congraciándose con ellos, jugando con ellos, sintiéndose niña también, sin más empaque que el íntimo de la sapiencia y la comprensión, sin otro deseo que el de influirles confianza, gusto por el saber, alegría del vivir...Su manera desenfadada y poética de decir en clase era el resultado de su amorosa entrega, de su absoluta dedicación a los niños.

Podría parecer, a primera vista, que la producción literaria de Celia Viñas no es extensa; pero, si tenemos en cuenta su intensa vida estudiantil hasta la obtención de la cátedra de Instituto, su vasta actividad académica y extraacadémica y su temprana muerte, no lo parecerá tanto. Cultivó los más variados géneros literarios: poesía, ensayo, teatro, novela, cuento. Además, sus innumerables artículos en prensa, periódicos y revistas, sus múltiples conferencias y una correspondencia que abarca centenares de cartas llenas de belleza literaria y tremenda sinceridad. Tanto en su prosa como en su poesía se repiten unos temas generales muy relacionados con su entorno. Destacan el paisaje almeriense, la inquietud religiosa, el amor humano y, ante todo, el mundo de sus niños, los alumnos del Instituto. Igualmente es común a toda su obra el carácter ocasional y espontáneo. Rasgo destacable es el tono poético que envuelve toda su obra. Poetiza cuanto escribe. Esa actitud poética hace que su prosa, los artículos, por ejemplo, sean en ocasiones, pobres de contenido y ricos de forma. Prosa llena de figuras literarias y descripciones coloristas."

(Francisco Galera Noguera.)